Con veinte bajo par y una vuelta de 67 golpes en la última jornada, el australiano Jason Day ha destrozado el recorrido de Wisthling Straits, ha sumado 1.800.000 dólares de lo diez millones que había en la bolsa del torneo y, además, lo ha hecho derrotando al nuevo número 1 del mundo, su rival en el último partido, Jordan Spieth, que acabó segundo a tres golpes del ganador del torneo. Sergio García terminó quincoagésimo cuarto, al par del campo.
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Day:"Si no hubiera fracasado antes no estaría aquí"
El nuevo "duelo al sol" estaba servido otra vez y los principales protagonistas,
Jason Day y Jordan Spieth, iban a ser los actores de una película de 18 hoyos bastante especatular pero en donde casi desde el principio se vio que Day estaba muy fuerte, confiado y seguro, si no de su victoria, de que podía tener muchas posibilidades de victoria, aunque su gran rival en esta última jornada fuera el doble ganador de Majors esta temporada,
Jordan Spieth.Y es que a pesar de esos tres golpes de diferencia que el australiano tenía sobre el estadounidense casi todo el mundo daba como claro candidato al tejano, sobre todo porque en los tres anteriores torneos del
Grand Slam Spieth ganó dos y terminó a un sólo birdie de poder jugar el
Play-off en el Open Championship.En el otro lado de la balanza, un
Jason Day especialista, sin duda, en torneos del Grand Slam. Con apenas 28 años ha jugado hasta el día de hoy
22 torneos del Grand Slam con un balance envidiable al que sólo le faltaba una victoria. En esas 22 participaciones ha quedado
segundo dos veces, cuarto y noveno en el Us Open, segundo y tercero en el Masters de Augusta, cuarto en el Open Championship y ahora primero en el PGA Championship.Un título que corrobora una gran temporada y una carrera en la que Day ya contaba con cuatro victorias en Estados Unidos, el
Farmers Insurance Open y RBC Canadian Open ganados esta temporada, el World Golf Championships-Accenture Match Play Championship en 2014 y el HP Byron Nelson Championship en 2010, su primera victoria en la PGA.Tras él, segundo y fraguando una carrera realmente ejemplar, un
Jordan Spieth (-17) que no ha podido llevarse el premio gordo de la victoria pero que seguro que se irá aa casa contento tras haber logrado en la tarde del domingo alcanzar una de sus metas profesionales en un año sin igual, el número uno del mundo arrebatándole a Rory McIlroy el honor de ser el mejor jugador del mundo.
Ya más atrás en la clasificación terminaron Brendon Grace, tercero en solitario con -15 y el inglés
Justin Rose, cuarto y mejor europeo en el torneo con catorce bajo par. En cuanto a Sergio García, el castellonense terminó con su mejor vuelta en el torneo, 70 golpes pero muy lejos de los puestos que debería ocupar y de las expectativas que seguro él missmo se habría puesto al principio del torneo.
La gran decepción del torneo ha sido, sin duda alguna -además del corte fallado por
Tiger Woods- la pobre actuaación de un
Rory McIlroy que no ha podido terminar nada más que décimo séptimo perdiendo su número uno y confirmando además que no jugará el primero de los Play-Offs de la
FedEx Cup para tener así más tiempo de recuperar al 100% su lesión en los ligamentos de su tobillo izquierdo.