Es indiscutible que Scottie Scheffler es con mucha diferencia el mejor jugador del mundo ahora mismo. El tejano llega como indiscutible líder a la última jornada del Memorial Tournament con cuatro golpes de ventaja, y todo después de dos momentos muy delicados en su ronda, que hubieran terminado con la paciencia de cualquier otro jugador, no con la de Scheffler. El número uno se fue al agua desde el búnker de calle en el hoyo 5, aunque solventó los problemas con un bogey. Lo peor estaría por llegar a mitad de ronda, en el hoyo 9, par 4, tiró su primera bola fuera de límites por la izquierda y concluyó el hoyo con un triplebogey que hacía esfumarse su ventaja. El torneo parecía comenzar de nuevo.
Pero estas son las circunstancias que marcan la diferencia, tres birdies más, levantaron por completo la ronda del cuatro veces ganador en 2024, el bogey en el 18 con tres putts solo fue una anécdota, y Scheffler selló el día con 71 golpes (-1) y cuatro de ventaja sobre el trio formado por su compatriota Collin Morikawa, el austriaco Sepp Straka y el canadiense Adam Hadwin.
Rory McIlroy se quedó sin opciones tras terminar con una ronda sobre el par de +1 mientras soprende el batazazo de Viktor Hovland que ha dado al traste con cualquier opción de pelear por el triunfo tras un nefasto día de golf que terminó con una tarjeta de 77 golpes, un total de cinco sobre el par del campo. Todo parece propicio por lo tanto para que Scottie Scheffler logre la quinta victoria de la temporada, justo en la antesala además del tercer major del año, el Us Open que se disputará la proxima semana.