Masters de augusta

Treinta años después de la victoria de Olazábal a por el séptimo Masters

El golf español quiere más

Guillermo Salmerón | Martes 09 de abril de 2024

El año pasado, al que Jon Rahm llegaba como máximo favorito a la victoria en la 87º edición del Masters de Augusta tras sus tres victorias consecutivas en el PGA Tour, se cumplían 40 años de la primera victoria del Severiano Ballesteros en Augusta en 1983, aquel en el que dejó a cuatro golpes de distancia a Ben Crenshaw y Tom Kite tras terminar con cuatro bajo par y lograr la primera Chaqueta Verde en la historia del golf español.






Jon, que siempre ha dicho que Seve ha sido un gran referente para él y que, en cierta manera, juaga al golf por él y su influencia en este deporte, no solo en España y en todo el mundo, llega esta semana al Augusta National para intentar igualar la marca de Seve y sus dos Chaquetas. Esta vez lo hace sin un bagaje tan extraordinario como el del año pasado. En 2024 ha ganado dos torneos por equipos de los cinco que ha jugado en el LIV Golf y ha terminado en los cinco torneos en el Top-10 de las respectivas clasificaciones, pero todavia no sabe lo que es ganar un título individual en el circuito de Arabia Saudi.

Y el Master de este año será una enorme oportunidad para que el de Barrika, que llega como tercer favorito a la victoria tras el número 1 del mundo, Scottie Scheffler y el número 2, Rory MacIlroy, sume su tercer Major y su segundo Masters en una semana donde tendrá otra gran referencia motivacional para colocarse sobre sus hombros su Chaquete Verde -porque hasta el domingo será suya- y unirse a tres grandes del golf mundial que lograron repetir victoria en este primer torneo del Grand Slam: Tiger Woods, Jack Nicklaus y Nick Faldo.

Y ese clavo al que agarrarse no será otro que el del gran José María Olazábal, el gran capitan de aquella Ryder inolvidable d2 2012 -el Milagro de Medinah- que también estará en Augusta recordando su primera victoria en Augusta cuando ganó su primer torneo del Grand Slam hace nada más y nada menos que 30 años.

Chema, que había empoezado a jugar al golf con sólo dos años en el RCG de San Sebastián donde trabajaba su padre Gaspar, fue uno de los mejores amateurs del mundo y su palmarés -más de 30 victorías por todo el mundo- culminó con esta primera Chaqueta Verde ganada en el 94 tras firmar un total de 279 golpes y 9 bajo par aventajando en dos golpes a un Tom Lehamn que no le puso nada fácil una victoria que luego repetiría en este mismo campo en 1999.

30 años que los dos, Rahm y Olazábal, celebrarán seguro. Ya el año pasado, nada más embocar su bola en el green y recibir el abrazo de su mujer, Jon se diirigió a la firma de tarjetas para certificar su victoria, pero antes, allí estaba Olazábal con su Chaqueta Verde puesta para recibir al de Barrika y darle un enorme abrazo que sellaba para siemprte la relación entre estos dos excelentes jugadores y Maestros del golf.

TEMAS RELACIONADOS:


Noticias relacionadas