Tras el vendaval, llegó la calma, un sosiego meteorológico que ha provocado el reclamo de paso expeditivo por parte de los pesos pesados del Campeonato de España de Profesionales Masculino que se celebra en el Campo de Golf de Logroño.
Víctor García Broto, Víctor Pastor, Pedro Oriol… demandan máxima atención a 18 hoyos para la conclusión, situándose en la parte más alta de la tabla como consecuencia de un bagaje profesional más que reconocido a sus espaldas.
“Estoy muy contento de poder vivir esta experiencia, de poder jugar con los mejores golfistas de nuestro país. Verme ahí arriba en la clasificación es algo que me hace sentir mucho orgullo por todo el trabajo realizado durante los últimos años. Hoy no he pateado tan bien como el primer día y esa ha sido la clave de la diferencia entre una y otra jornada”.
Por fortuna, al tercer día, el Campeonato de España de Profesionales Masculino recompuso sus costuras en cuanto el viento se fue a otros lares, el molesto culpable de que el torneo haya quedado reducido a 54 hoyos.
Juan Salama, Sigot López, David Borda, Emilio Hernández… adquirieron por minutos la condición de líderes fugaces, la distinción provocada por una clasificación en continuo movimiento, a la espera de su asentamiento definitivo.
Al acecho, pisándole los talones, se encuentra Víctor Pastor, también miembro del Pro Spain Team y segundo clasificado en el Challenge de España en 2022. El cordobés se descolgó con la mejor vuelta del día, 7 bajo par que generan muchas papeletas para el triunfo final. Un eagle en el hoyo 18 puede ser premonitorio en esos finales apretados que caracterizan desde hace tantos años al Campeonato de España de Profesionales Masculino.
“Estoy ahí, que es lo importante. Le he pegado a la bola bastante bien en las dos jornadas. He aprovechado las opciones de birdie que he tenido, que han sido bastantes, y eso me ha llevado a conseguir la mejor vuelta del día. Muy sólido, muy fino con el putt. Me ha venido muy bien el eagle en el hoyo 18, aprochando desde lejos. Mañana habrá que hacerlo muy bien para ganar porque la competencia es enorme”.
Por su parte, el papel de tercero en discordia lo representó un Pedro Oriol que ansía ampliar su notable palmarés profesional. El madrileño completó la vuelta sin errores para repetir esa propuesta de 66 golpes de Víctor García Broto que se antoja el nivel que deben repetir los mejores para ganar el título en la jornada dominical.
Todo ello bajo la atenta mirada de José María Olazábal, que siguió a lo suyo, sumado dos admirables 69 golpes a su marcador particular. “Cómo juegan, es otra liga”, alababa con sinceridad el maestro vasco, noveno clasificado, un resultado espléndido que confirma, efectivamente, que él juega otra liga, la de quien ejerce magisterio allá donde va.