El recuerdo y la presencia de Seve Ballesteros no dejan de estar en cualquier rincon de cada Ryder Cup que se disputa. Su imagen es venerada, no solo por europeos sino también por los americanos que le reconocen como el hombre y jugador que cambió esta competición y que con su calidad le dió una nueva dimensión.
Esta mañana, en Marco Simone, y antes de que comenzaran los partidos de esta segunda sesión de Foursomes se le hizo un homenaje espectacular que nos puso a todos los pelos de punta.
Cada punto y cada victoria del equipo de Luke Donald en esta edición de la Copa va dirigido a su recuerdo y a lo que hizo por la Ryder y por el golf mundial.