El equipo europeo de la Ryder Cup capitaneado por el inglés Luke Donald busca desde el viernes y hasta el domingo intentar recuperar la Copa que perdió por un contundente 19 a 9 en Whistling Straits y que dejó clara la situación de ambos equipos en una Ryder Cup que, seguramente fue la más desigual de los últimos años.
Antes de esta última victoria americana, la vigésimo séptima en la historia de la Ryder Cup, Europa venía dominando la competición con claridad. En las últimas diez ediciones -de 1999 a 2018- Europa sumó ocho victorias y sólo dos derrotas, las que el equipo del Viejo Continente cosechó en The Country Club, en Masachusetss en 1999 y en el Hazeltine National GC en 2016.
Pero ahora las cosas han cambiado. Estados Unidos parece, a priori, favorito a conseguir una victoria que viene avalada por su histórico triunfo de hace dos años y por la calidad de sus jugadores. Este año Sam Burns, Patrick Cantlay, Wyndham Clark, Ricky Fowler, Brian Harman, Max Homa, Brooks Koepka, Collin Morikawa, Xander Schauffele, Scottie Scheffler, Jordan Spieth y Justin Thomas serán los encargados desde el viernes hasta el domingo de defender una Copa que trajo en sus propias manos el capitán Zach Johnson que tendrá como ayudantes a Steve Stricker, Davis Love III, Jim Furyk, Fred Couples y Stwart Cink. Un equipo con mucha experiencia que llega a Marco Simione, en Roma, con la intención de ir a por todas y sumar el vigésimo octavo triunfo en la competición.
Freente a ellos un equipo locar que quiere olvidar y que tiene ya olvidado lo que sucedió hace dos años. Con un equipo en donde hay mucha juventud, pero también mucha experiencia, aunque sin buenos resultados en los últimos meses, el combinado europeo llega con varios primeros espadas mundiales como Jon Rahm y Rory McIlroy que será las piedras de toique de un equipo en el que Rookies y veteranos intentar´n seguir el ritmo marcado por sus dos grandes estrellas.
Junto al español y al norirlandés estarán Ludvig Aberg, Matt Fitzpatrick, Tommy Fleetwood, Tyrrell Hatton, Nicolai Hojgaard, Viktor Hovlan, Shane Lowry, Robert Mcintyre, Justin Rose y Seep Straka.
Con ellos, comandando el equipo, un Luke Donald que llegó de rebote cuando el primer capitrán del equipo fue el sueco Henrik Stenson que por su condición de jugador del LIV fue destituido de su cargo.
Este año ningún jugador del LIV jugará en el equipo europeo, ni siquiera el jugador con más puntos en la historia de esta competción, el español Sergio García, aunque en el equipo norteamericano si estará Brooks Kopeka, jugador estadoundiense del LIV series.
Junto a Donald cinco vicecapitanes con muchas tablas en esta competición comko el guipuzcoano José María Olazábal, Thomas Bjorn, Nicolas Colsaerts, Francesco Molinari y Edoardo Molinari, los dos representantes italianos en el equipo europeo.
En cuanto al campo, un recorrido como Marco Simone que exigirá lo máximo a los jugadores y que tendrá un protagonismo muy importante en cada uno de los puntos y partidos que se juegen en esta edición que reunirá en el campo romano a miles de espectadores venidos de todo el mundo para ver si los americanos siguen mandando o los europeos le dan la vuelta a la tortilla.
Hace unos días Europa ganaba en Finca Cortesín con Carlota Ciganda como protagonista final del último golpe después de que el equipo de la PING Junior Solheim Cup ganara por paliza en La Zagaleta. veremos como van las cosas en Roma, primero con la Junior Ryder Cup y con la Ryder Cup.