La última victoria de Pablo Larrazábal en los Países Bajos, su segunda de este año y la cuarta en catorce meses, han colocado al barcelonés en el puesto 53º del Ranking Mundial, su mejor posición hasta ahora y con un sueño que, poco a poco, se puede ir haciendo realidad y no es otro que poder jugar este mes de septiembre en Marco Simone, en roma, en Italia una nueva edición de la Ryder Cup.
Allí, en el equipo de Luke Donald tiene ya un puesto completamente asegurado el vizcaíno Jon Rahm, número dos del mundo que entraría en el equipo por ese Ranking Mundial junto a otros dos jugadores más de manera directa a fecha de hoy: el norirlandés Rory McIlroy y el noruego Viktor Hovland, séptimo ahora mismo en la clasificación mundial.
Este año Donald tendrá a tres jugadores provenientes del Ranking Mundial y a los tres primeros del Tour Europeo que ahora mismo serían el francés Victor Pérez, el polaco Adrian Meronk y el alemán Yannick Paul.
Un escalón por debajo de ellos se sitúan Adrián Otaegui sexto con 1346.8 puntos, Jorge Campillo, octavo con 1145.73 y Pablo Larrazábal con 1109.75 puntos ocupando la novena posición.
Será el 3 de septiembre cuando Donald conforme, definitivamente, el equipo y además de los seis jugadores del Ranking Mundial y del europeo dará sus seis elecciones personales que conformarán los 12 protagonsitas de un equipo europeo que intentará recuperar la Copa ganada y defendida por el equipo europeo hace dos años.
Da la sensación que ya se ha hecho un buen trabajo por parte de los tres -Otaegui, Campillo y Larrazábal- y que hora queda el trabajo más duro e importante para intentar lograr un sueñó que los tres tienen en mente, aunque como dice el barcelonés, "si llega es que nos lo merecemos y habremos estado jugando bien".