Solo nueve jugadores fueron capaces de ganar a Oak Hill en la tercera jornada del PGA Championship. Solo nueve rondas bajo el par en el mejor plantel posible de jugadores. El día del movimiento en este segundo major del año confirmó que no será Jon Rahm (a 12 golpes) el ganador de de esta cita, o que Brooks Koepka prersentó las más serias credenciales al triunfo tras firmar su segundo 66 consecutivo. El norteamericano de 33 años acumula cuatro majors y saldrá a la jornada defiinitiva como líder con un golpe de ventaja sobre el noruego Viktor Hovland y el canadiense Corey Conners, ambos sin experiencia en pelear por torneos majors. Con -3, Bryson DeChambeau por fin aparece competitivo ocupando la cuarta plaza del torneo justo por delante del número dos del mundo, Scottie Scheffler. Cerrando los resulados bajo el par tras 54 hoyos y en la séptima posición aparece Rory McIlroy con un resultado de uno bajo el par.
La sorpresa del torneo está siendo de momento la actuación de Michael Block , profesional de club que se mantiene, con un resultado acumulado de par, un puesto entree los 10 primeros. La lluvia fue protagonista durante toda la jornada, el campo mojado y un rough con mayor densidad están siendo las torturas principales del segundo major del año, donde la situación va a llegar ajustada de cara a los últtimos y definittivos 18 hoyos.