"Esta semana no pensaba venir a jugar aquí. No estaba jugando bien, pero vino mi entrenador y mi mujer me dijo que a lo mejor era mi semana, y mira, me voy con victoria". Después de Ras Al Khaimah estaba pensando en ir a casa y practicar porque el swing no estaba bien. Hablé con mi entrenador, trabajé duro para que el swing volviera a su sitio, así que estoy sin palabras", dijo.
Tras él ha terminado con un golpe menos (-18) el finalndés Sami Valimaki al que le falto un poco más de empuje en la última fase del torneo. Su último birdie se produjo en el hoyo 13 y hasta el 18 no fue capaz de producir ningún acierto más para quedarse a un solo impacto de un posible Play-Off.