Tiger Woods se retiró del PGA Championship después de firmar una vuelta de 79 golpes este sábado, su vuelta más alta en este Major a lo largo de su carrera.
Woods lo paso muy mal este sábado bajo unas condiciones de frío bastante duras e insinuó después de su ronda que podría retirarse y no jugar el domingo. Su retirada se anunció poco después de que el grupo final completara la tercera ronda en Southern Hills.
“Bueno, estoy dolorido. Trabajaremos un poco y veremos cómo va todo”, dijo Woods después de su ronda. Después de disparar un 69 en la segunda vuelta para pasar el corte, Woods tuvo problemas desde el principio el sábado. Tras 13 hoyos estaba con +10 en el marcador, una tarjeta que arregló en los últimos cinco hoyos acabando con 1 bajo par.
Esta es la segunda retirada de Woods en un torneo del Grand Slam. Woods ya se retiró del US Open de 1995 después de lesionarse la muñeca en la segunda ronda mientras golpeaba la bola desde el rough. Ese fue el primer abandono de Woods de cualquier evento desde Dubai en 2017 y el primero en un evento del PGA TOUR desde el Farmers Insurance Open de 2015. El agente de Woods, Mark Steinberg, dijo que Woods sufría un fuerte dolor en el pie el sábado.
“Tiene dolor y molestias en el pie. “Simplemente pensó que lo mejor para él era no jugar mañana”. "Por mucho que esté trabajando y tratandome la pierna, el cuerpo simplemente no coopera”, dijo el caddie de Woods, Joe LaCava
"Simplemente no jugué bien", dijo Woods el sábado. “No le pegué muy bien a la bola y no tuve el comienzo que buscaba. Pensé que había hecho un buen golpe de salida en el 2 y terminé en el agua. Desde ahí no pude bajarme del tren fantasma... No hice nada bien. No hice buenos tiros. En consecuencia, terminé con una puntuación bastante alta”.