Jon Rahm parte hoy como claro favorito a la victoria en el Waste Management Phoenix Open, torneo que se disputa en el TPC de Scottsdale, en Arizona, a apenas unos kilómetros de la residencia habitual del número dos del mundo.
Rahm partirá este jueves en el partido estelar del torneo con Harris English y Justin Thomas en una cita en la que Rahm tiene muchas ganas de hacerlo muy bien ante el poco público que asistirá al torneo -unos 5.000 espectadores diarios- que darán un total de 25.000 o 30.000 cuando este torneo batía cada año el número de aficionados que veían el torneo en directo, llegando el año pasado a casi 730.000 espectadores en la semana de juego.
En la rueda de prensa de ayer Jon estaba encantado de poder contar con ese apoyo. "Estamos acostumbrados últimamente a no tener publico en el campo así que es de agradecer que por lo menos puedan entrar unos 5.000 espectadores cada día. Ya se les oye y se les siente y es muy afgradable volver a sentior el calor y el apoyo del público", dijo.
De nuevo Jon volvió a comentar el tema del nacimiento de su primer hijo que se espera para la segunda semana del mes de marzo.
“Creo que la segunda semana del mes de marzo, va a ser la semana 36, y como me ha dicho mi mamá, que ha sido matrona muchas veces, a partir de esa semana el niño puede llegar cualquier día”
“No importa dónde esté y qué esté haciendo, si suena el teléfono volaré de regreso a casa para estar allí para el nacimiento de mi hijo. Antes de que alguien pregunte, sí. Si estoy en Augusta y estoy jugando bien o voy líder y ella empieza a ponerse de parto, que nadie dude que cogeré el avión y volaré de regreso. Nunca me perdería el nacimiento de mi primogénito ni en un millón de años", aseguró tajante.
"En Augusta no podemos tener nuestros teléfonos conectados, así que no se como lo voy a poder hacer. Es posible que necesite pedir una excepción en ese sentido porque tengo que tener comunicación directa con casa en todo momento".