El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha avanzado que la incidencia acumulada de positivos por Covid-19 en la Comunidad descenderá este miércoles a 400 casos por cada 100.000 habitantes, aproximadamente. Con esta cifra sobre la mesa, tanto el regidor madrileño como la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, han reiterado esta tarde en una comparecencia conjunta en la Puerta del Sol su petición al Ejecutivo nacional de que levante el estado de alarma, condicionado a que se superaran los 500 casos. Ambos han cargado contra el criterio "inventado" por el ministro Salvador Illa esta mañana por el cual fija en "200 o idealmente menos de 100" la "perspectiva" de positivos que debería darse en la autonomía para retirar las restricciones a la movilidad impuestas el pasado día 8.
La Comunidad de Madrid ha conseguido cumplir con este primer parámetro fijado por Sanidad para evitar el cierre perimetral de las ciudades con una población mayor de 100.000 habitantes, pero no con los otros dos. El porcentaje de positividad en los resultados de las PCR en la Comunidad se sitúa en 17,9 frente al 10 de tope que fija Sanidad y la ocupación de camas por pacientes con coronavirus en UCIS es de un 38 por ciento, cuando no debería superar el 35. No obstante, Almeida ha precisado que estos tres criterios son acumulativos, por lo que "no se dan los requisitos que el Gobierno de la nación dijo en su momento" para continuar con el 'cerrojazo'.
El regidor madrileño ha descrito estos datos como "preocupantes", pero ha remarcado que "no justifican" el estado de alarma. "En las tres últimas semanas, la Comunidad ha reducido el número de contagios en un 50 por ciento", ha señalado antes de puntualizar que 16 de los 21 distritos de la capital se encuentran por debajo del umbral de la incidencia acumulada marcada. Ante esta realidad, el primer edil ha insistido en "seguir profundizando" en los confinamientos selectivos. "Las cifras de ahora son las mismas que las de la semana del 24 al 30 de agosto y no tenemos noticia de que en aquel momento se dijera que había que decretar el estado de alarma", ha agregado.
Martíne-Almeida ha pedido explicaciones sobre este repentino cambio de criterio del titular de la cartera de Sanidad. "Ya que a los madrileños se les está pidiendo un esfuerzo extraordinario, lo mínimo es explicarles cuáles son las razones y los fundamentos", ha apuntado. Así, el alcalde ha cuestionado la arbitrariedad de la nueva pauta planteada por Salvador Illa: "No puede ser un ejercicio de lealtad que cuando Madrid esté bien le bajo la media de 500 a 200".
Por su parte, Ayuso ha hablado de un "cambio de reglas inventado por Illa" que, a su juicio, no obedece a criterios sanitarios y ha salido en defensa de las restricciones por zonas básicas de salud que dictó su administración: "Nuestras medidas sanitarias están permitiendo bajar las cifras de contagio, de hospitalizaciones, de atención hospitalaria, cada día, tal y como nos informan los técnicos de la Consejería de Sanidad y reconoce la Organización Mundial de la Salud", declaró.
Además, reprochó la forma en la que han conocido la intención ministerial. "Nos hemos enterado por los medios en lugar de hacerlo en la reunión del Grupo Covid de esta tarde", ha indicado. El consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, ha corroborado este punto, asegurando que no se ha propuesto tal cuestión en ningún encuentro previo entre ambas partes y ha reflexionado que "no se puede pasar cada día de un criterio de incidencia acumulada a otro según como se levante el ministro". Por ello, ha invitado a este a que establezca un marco definitivo homogéno y no "ad hoc" para la región.
En esta misma línea también ha ahondado más tarde José Luis Martínez-Almeida, quien ha recordado que la media nacional se sitúa en 259 casos por 100.000 habitantes. "¿Le suscita al Gobierno alguna preocupación, a parte de Madrid, que el conjunto de España esté muy por encima del umbral máximo fijado esta mañana?", ha planteado. Así, el regidor capitalino ha citado a Navarra, gobernada por el PSOE, y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, donde la competencia sanitaria corresponde al propio Ministerio, como territorios donde la incidencia del virus también rebasa la aconsejable. "Hay que ser coherente porque no es justo 'secuestrar' a los madrileños por una batalla política", ha sostenido.
En un tono más político, la presidenta regional ha culpado a Pedro Sánchez de "dinamitar el Estado de Derecho con la excusa del bien común", un camino que para ella lleva directo "hacia la anarquía y la vuelta a regimenes totalitarios". Ayuso ha tildado de "intervención atropellada" la determinación de declarar el estado de alarma, la "peor decisión que ha podido tomar en relación con la salud de los madrileños". Respaldada por la sentencia judicial del TSJM, que tumbó el primer cierre de diez municipios madrileños, ha hecho hincapié en que "se debe acatar los fallos de los tribunales tanto si son favorables como si no lo son".
La dirigente 'popular' ha manifestado que la ayuda prometida por el presidente del Gobierno en su encuentro hace unas semanas "nunca llegó", a excepción de los efectivos que ofreció Defensa que después no resultaron necesarios al decretarse el estado de alarma. "No nos han enviado ni un solo policía a las estaciones de AVE ni a Barajas", ha condenado. Por ello, ha trasladado que espera que este tipo de reuniones, entre las que se englobaría la del Grupo Covid-19, "no sean un señuelo para mantenernos entretenidos ni grupos para generar el caos, que es lo único que están consiguiendo".
Pese a los ataques al Ejecutivo central, la máxima mandataria de la Comunidad ha destacado el carácter "dialogante" de su Gobierno y ha tendido la mano para sentarse de nuevo a "mejorar" juntos el "plan que tan buenos resultados estaba dando", en relación con la estrategia autonómica de 'confinar' solo por zonas.
Por otro lado, en la comparecencia desde la sede del Gobierno regional, Ayuso ha descartado adoptar restricciones adicionales a las de la movilidad. Otras autonomías, como Cataluña, han optado por retomar las clases online en el ámbito universitario, pero la presidenta madrileña considera que "si el virus va bajando, no son necesarias medidas nuevas".
La dirigente del PP ha apelado a la "cautela" a la hora de implantar limitaciones ya que si se exceden al aplicarlas sobre la hostelería o el comercio, además de "arruinar" a estos sectores "trasladaremos el virus a las casas". Por eso, ha defendido sus medidas "quirúrgicas" y ha aseverado que los establecimientos que cumplen con las normas son lugares seguros. En relación con este asunto, José Luis Martínez-Almeida ha pedido que se estudie la ampliación hasta las 00:00 horas de la apertura de la restauración "en vista de que, en general, hacen un ejercicio responsable" de su actividad.