Opinión

Pasta de héroe

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Guillermo Salmerón | Lunes 31 de agosto de 2020

Este tipo de 25 años de 1,90 y 120 kilos de peso, Jon Rahm, de Barrika, España, es ya hoy por hoy uno de los mejores deportistas de la historia de nuestro país.






Muchos dirán que todavía le quedan muchos títulos para emular al gran Severiano Ballesteros, incluso a Sergio García o a José María Olazábal pero Rahm tiene una cosa que ninguno de ellos tenía y es que ha sabido asimilar precisamente lo mejor de los tres.

De Seve su corazón, su garra, sus ganas de ganar, sus puños paseando por el aíre y esa falta de miedo a arriesgarse y dar los golpes que en ese momento se le pasan por la cabeza.

De Sergio García su descaro, ese juego alrededor de green que tantos títulos le han dado al castellonense y esa falta de pudor a la hora de enfrentarse con quien sea y donde sea.

Y de Chema Olazábal la calma, la tranquilidad y la capacidad de analizar todo lo que hay alrededor de el dentro y fuera del campo.

Un cóctel perfecto que adereza con un tanto por ciento muy elevado de su propia cosecha que ya vió cuando apenas tenía 13 años la presidenta de la RFEG Emma Villacieros. "Este chico tiene que estar en los equipos nacionales tenga el caracter que tenga", dijo.

Y dicho y hecho. De ahí a la Blume y a todas las categorías de los equipos nacionales a los que dio títulos, gloria y algún que otro quebradero de cabeza. Después a Estados Unidos a formarse como jugador y persona en Arizona State, la Universidad en la que también estuvo Phil Mickleson -que ya dijo que "Jon sería número uno del mundo"-. Allí fue número 1 amateur y allí dio sus primeros pasos en el PGA Tour donde ha ganado ya cinco torneos, ha alcanzado el número uno del mundo y ahora busca su primera FedEx Cup.

Títulos y curriculums que irán creciendo según vayan pasando los años. Es cierto que todavía le faltan los Majors, pero tranquilos que llegarán como les llegaron a Woods, al propio Mickelson a Seve, a Chema y a Sergio. Rahm tendrá los suyos y espero que todos los veamos






De momento, disfrurtemos de este lujo de deportista que ayudará cada vez más a que el golf vuelva a ser respetado y apreciado por todos como cuando Seve paseaba nuestro deporte por todo el mundo victoria tras victoria.

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