Hace unos días desde Noruega, Dinamarca y Suecia se seguían manteniendo los camopos de golf abiertos para que con ciertas restricciones se puediera entrar en los campos de golf y se pudiera jugar.
Poco a poco, sobre todo en el norte de Europa, las cifras de infección y contagio del Coronavirus sigue mejorando y por esa razón desde este lunes en algunas regiones de Alemania se abriran los campos de golf para que algunos aficionados puedan disfrutar de nuevo de su deporte favorito, aunque en unas condiciones muy especiales.
De momento, los partidos sólo podrán ser de dos jugadores que llegarán al club diez minutos antes de la salida de su hora. No podrán usar buggies sino que tendrán que ir andando con la bolsa al hombro o con carritos manuales o eléctricos. Los partidos saldrán cada diez minutos y los jugadores deberán ir separados dos metros como mínimo entre ellos.
No podrán tampoco tocar las banderas ni sacarlas del hoyo, no podrán meter la mano en el hoyo para coger la bola y tampoco podrá usar los rastrillos de los bunkers que deberán arreglar con los pies.
En cuanto a las instalaciones, la casa club estará cerrada, así como los vestuarios y el bar del Club y los jugadores deberán llevar consigo geles hydroalcoholicos.