Hasta el hoyo 11 Joost Luiten, que había firmado una gran vuelta de 66 golpes el primer día para situarse colider del torneo con Sergio García, no había hecho nada especial en una tarde en la que había entregado una tarjeta en sus nueve primeros hoyos con un bogey en el hoyo 4 y un único birdi en el 6 que le mantenían con los cinco bajo par con los que había comenzado el torneo.
“En el 11 pegué un buen drive y tenía 209 metros basta la bandera, en buena posición desde el semirough. Tenía algo de viento a favor y era la distancia perfecta para un hierro 4. La toqué bien, picó en el green a un par de metros de la entrada, rodó y oí al público volverse loco. No lo vi desde allí abajo, pero sabíamos que había entrado. Un albatros siempre es especial y me alegro de haber logrado el primero en ese hoyo.”
“Cuando estás en racha quieres mantenerla, así que pegué un hierro 5 a bandera en el hoyo siguiente, picó a un metro de bandera y luego convertí el putt para birdie para hacer dos doses consecutivos. Eso es lo que quieres: cuando estás enchufado, vas a por todas las banderas. Salvé un par de buenos pares en el 13 y el 14; por desgracia, fallé en el 15 y tuve algo de mala suerte con el drive en el 17, ya que se me quedó clavada en el búnker, pero también he tenido fortuna en un par de ocasiones y así resulta más fácil aceptarlo cuando la suerte te da la espalda.”
“Valderrama es así. Puedes hacer birdies y cometer bogeys del mismo modo. Me gusta el campo y ya he quedado segundo aquí, así que espero tener un buen fin de semana, ganar y abrir el champán el domingo por la noche. Pero aún queda mucho golf por jugar. Creo que el campo se jugará un poco más corto desde el tee pero será más difícil mantener la bola en calle. Aún está bastante blando, así que podamos ir a por las banderas con agresividad, pero hay que coger calles. 10 bajo par puede ser un buen resultado ganador.”
En los nueve segundos, el holandés empezó con otro bogey más al 10 que le empezaban a complicar las cosas pero en el 11, un largo par cinco de 509 metros, Luiten, que había pegado un buen driver a calle pego de maravilla el segundo golpe tan bien que la embocó en el hoyo firmando el tercer albatros en la historia de este campo en un torneo oficial tras los logrados por el gran Miguel Ángel Jiménez en el Voplvo Masters de 1994 y el norirlandés Grame McDowell en el Volvo Masters de 2007, también en el hoyo 17.