Los foursomes de la mañana en el West Des Moines han dejado mucha igualdad en una Soheim que se presenta intensa y dura, a pesar del favoritismo de las estadounidenses pero que comienza 1,5 a 2,5 a favor de las europeas.
En un ambiente de gala, con unas gradas con capacidad para 7.000 espectadores, Cristie Kerr y Lexi Thompson abrieron esta décimo quinta edición ante Mel Reid y Charley Hull. A pesar del impulso inicial de las americanas, ganando el primer hoyo, las europeas recuperaron terreno en el 4 y 5, tomando ventaja en el marcador. A partir de ahí un intercambio de golpes que no convenía al equipo local, siempre bajo el dominio de las inglesas que en el 12 y 13 volvían a alcanzar los dos hoyos de ventaja. Sin embargo, dos birdies estadounidenses en el 17 y 18 repartían medio punto a cada equipo, un botín que sabía a gloria para las locales.
En el partido de Carlota Ciganda y Caroline Masson, el más igualado de los foursomes, dejó muy buenos momentos. Tras una primera vuelta de control estadounidense, con Danielle Kang y Lizette Salas ganando tres hoyos y cediendo en uno, la segunda vuelta fue la de la reacción europea, con victoria en los hoyos 11 y 14 para empezar de cero. Un espejismo, ya que Kang y Salas volvían a golpear ganando en el 15 y 16 tras los bogeys europeos. Reacción europea en el 17, pero el par de ambos equipos daba el punto a las americanas.
Por su parte, Anna Nordqvist y George Hall se las veían con Paula Creamer y Austin Ernst. Aunque parecía que las europeas tenían el control, ganando tres hoyos en la primera vuelta, las americanas fueron de menos a más, recuperando terreno al ganar los hoyos 7, 9 y 12. Siempre por debajo en el marcador, las estadounidenses no se rendían, pero no podían traspasar el muro europeo que de nuevo en el 16 se ponían dos arriba, una distanca insalvable que dejaba el partido 3 y 1 en el 17.
En la última batalla de la mañana, Karine Icher y Catriona Mathew se enfrentaban a Stacy Lewis y Gerina Piller. Tras dos golpes estadounidenses en los hoyos 3 y 4, las europeas se repusieron con dos victorias en los hoyos 13 y 14. Antes, diferentes triunfos en otros dos hoyos para cada equipo. Cuatro hoyos por tanto para decidir el punto en juego. El bogey en el 16 de las americanas daba ventaja a Europa que sentenció en el 18 para poner por delante a Europa.