Tampoco ha sentido Alejandro Cañizares que haya jugado mal pero este campo de Valderrama ha vuelto a hacer de las suyas. Tras una ronda de 75 golpes reconoce que "un fallito aquí se acentúa mucho más", y ha acusado el viento que le ha impedido "coger ritmo".
Cañizares es consciente de que "no me he ido del torneo y estoy con muchas ganas de cara al fin de semana. Sólo tengo que coger más confianza en los greenes", dice.