Tiger Woods aseguró que no apresurará su regreso a los campos, que tiene previsto para 2016, y que cumplirá una rehabilitación "larga y tediosa".
Tiger: "Sólo estoy tratando de mejorar"
El tigre ya no ruge
Woods, de 39 años, se sometió a una segunda operación de espalda hace un mes aproximadamente, después de la que se le practicó en marzo de 2014, y con ello canceló tres torneos que tenía previstos para final de año, entre ellos la segunda Copa América de Golf, a disputarse en la capital mexicana del 22 al 25 de octubre.
"Me siento bien, solamente un poco rígido (de la espalda) y eso es normal después de una cirugía", señaló el jugador de golf más popular de los últimos 20 años, quien añadió que aunque puede hacer "casi todo", se ha perdido los entrenamientos de fútbol con sus hijos.
En rueda de prensa en la capital mexicana, Woods anticipó que cumplirá "una rehabilitación larga y tediosa", la cual a algunos jugadores les ha costado estar fuera de los campos durante más de un año, pero confió en que no le "lleve tanto tiempo estar sin dolor. Mi regreso es parte de un proceso y empezará con cosas pequeñas, para luego ser más explosivos y "practicar por largos periodos de tiempo".
"No sé cuántos meses me va a tomar, pero es algo que me llevará mucho tiempo y mucho trabajo", comentó Woods, quien reconoció que para estar en posibilidades de competir necesita tener buena salud.
La primera cirugía de espalda le provocó cambiar su swing y la segunda le obligará a practicar mucho tras cumplir plenamente con la rehabilitación. Si bien el estadounidense no gana un Major desde 2008, aún aspira a alcanzar la marca de 18 "grandes" del jugador leyenda Jack Nicklaus.