La industria del golf ha tenido un pasado convulso durante su desarrollo en
. Y desde el pasado mes de abril la persecución al "juego de los ricos" se ha endurecido aún mas. En estos días en la prensa se sigue el caso de un
Este año se han cerrado
66 instalaciones, el 10% de los clubes que tenían problemas en sus registros y licencias. No en vano China fue la pasada década el país que más campos de golf construyó, todo esto en un país de 700 millones de campesinos.
Mientras los clubes son perseguidos siguen su desarrollo bajo otras denominaciones. La más utilizada es "instalación ecológica" aunque para su construcción en muchos casos se muevan tierras, se desvié el curso de los ríos o simplemente se expulse a los campesinos de sus tierras.
En Hainan, cerca de Mission Hills, los campesinos han comenzado las luchas por recuperar las tierras. Hace años fueron recolocados por el Gobierno abonado 2 dólares por metro cuando. El Gobierno vendía esa misma tierra a 75 dólares por metro cuadrado a la empresa norteamericana encargada del proyecto.
Estos días en las portada de los diarios sensacionalistas aparece Tiger Woods, no por una nueva hazaña golfística sino por cobrar 16,5 millones de dólares por el diseño de dos clubes en Shenzhen, donde Bubba jugó y cobró 2 millones por hacerlo.
Tendremos que esperar a Río para ver los resultados del golf chino en los Juegos, y después ver las actuaciones del Gobierno.