Con dieciocho años recién cumplidos Lidia Ko ha vuelto a conseguir una nueva victoria en la LPGA que la consolida en el número uno del mundo y la deja como clara dominadora del golf mundial en un torneo que ganó después de embocar un putt de metro y medio en el segundo hoyo de Play-Off frente a Morgan Pressel.
Se había hablado durante toda esta semana de una nueva jovencísima jugadora que había copado también los primeros puestos de la clasificación de esta nueva cita de la LPGA donde estaban las mejores jugadoras del mundo.
Y es que la canadiense Brook Henderson había jugado de maravilla durante las tres primeras jornadas y partía -a pesar de tener apenas 17 años- como una de las principales candidatas a conseguir la victoria en este torneo en el que Lydia Ko cumplía 18 años y además defendía título.
Pero ayer, en la cuarta y definitiva vuelta, a Henderson se le torcieron algo las cosas y con 74 golpes, su por vuelta de la semana, se quedó a un golpe del liderato y del desempate que finalmente jugaron la neocelandesa y número uno del mundo y la estadounidense Morgan Pressel, que soñaba con una victoria que no logra en la LPGA desde 2008.
Pero sobre todas ellas pululaba una jugadora que parece tocada por la varita de la maestría, la paciencia y los putts de oro para ganar. Ko, que el viernes celebraba su décimo octavo cumpleaños sumó una nueva victoria en su palmarés demostrando entre otras a Stacy Lewis e Imbee Park que hay número uno para rato. Su juego espectacular volvió a darle los réditos de la victoria y a colocarla ya como clara referencia de un golf femenino que tiene en ella a su norte más claro.
En cuanto a las españolas, Azahara Muñoz terminó trigésimo tercera con tres sobre par, María Hernández quincuagésimo tercera, con +7 y Carlota Ciganda, que terminó sexagésimo segunda con +10 y con sus cuatro vueltas por encima de 70 golpes firmando el sábado un 79 que deja a las claras su mala semana.