Opinión

Ok Lydia Ko

Opinión

Carmela Fernández Piera | Lunes 24 de noviembre de 2014
Lydia Ko ha roto todos los moldes. Ha hecho historia. Ya la había hecho antes de ser profesional y sigue haciéndolo. La niña que obligó al LPGA a cambiar sus normas para que ella pudiese competir como miembro del mejor circuito de golf femenino mundial, ha demostrado al mundo que no era un mero capricho de teenager, y sobre todo a mi que, tras mucha crítica, me quito el sombrero ante su hazaña final.

Lydia Ko venció ayer en el CME Group Tour Championship cerrando una temporada espectacular. Aunque diré que no me alegra tanto esa victoria porque fue a costa de Carlota Ciganda, que estuvo sublime, aguantando magistralmente cuatro hoyos de play-off frente a la ganadora más joven de la historia del LPGA. Desde aquí, mi aplauso interminable a Carlota por su actuación en la final, de campeona, pero tristemente sólo puede ganar una, y no fue ella. Hoy todos los vítores van para la neozelandesa Ko.






Llegaba al Tiburón Golf Club de Naples, en Florida, a jugar la final tras una temporada brillante, ya con la corona de Rookie del Año más joven de la historia del LPGA y número 3 del mundo. No tuvo un comienzo especialmente bueno pues con 71 golpes se quedaba a 5 de la líder, Julieta Granada; repitió resultado en la segunda jornada manteniéndose a 5 golpes de la cabeza en un torneo duramente azotado por el viento. La remontada empezó en la tercera vuelta, en la que se postuló para el título firmando siete birdies para 3 bogeys, 68 golpes y partía en la jornada final a sólo 3 de la cabeza. 

Sabía que con una vuelta limpia de errores podría adjudicarse el título, y así lo hizo. Fue la única de las que optaban a la victoria que presentó una tarjeta limpia de errores para forzar el desempate contra Carlota Ciganda y Julieta Granada. La paraguaya cayó en el segundo hoyo, y la navarra aguantó el pulso hasta el cuarto hoyo de play-off que le dio la victoria a la jugadora más joven del LPGA. Con esta, firmaba su tercera victoria en su primera temporada como profesional, en la que no ha fallado un solo corte en 42 torneos disputados y ha hecho un total de 15 top ten. Espectacular.

Un aplauso merece también la norteamericana Stacy Lewis, que tras perder el liderato mundial en el mes de agosto, ha finalizado la temporada por todo lo alto, imponiéndose en los tres galardones más prestigiosos que estaban en juego: Trofeo Rolex a la Jugadora del Año, Trofeo Vare a la media de resultados más bajos; y primera en ganancias del LPGA.

Realmente lo de Lydia Ko es impresionante, pero esto no quiere decir que a partir de ahora yo vaya a cambiar de opinión, sigo pensando que es una atrocidad que se presione a una niña o niño de 12, 13, 14 y hasta 15 años para competir entre los mejores jugadores del mundo en cualquier deporte. Resulta un tanto irónico que una niña que aún no ha podido sacarse el carné de conducir, se haya embolsado esta semana un millón y medio de dólares, el mayor premio en toda la historia del golf femenino. Cada cosa a su tiempo, pero el del Ko está claro que ha llegado.

TEMAS RELACIONADOS: