Es cierto es que en 2012 se encontró, casi sin quererlo con la victoria después de que Adam Scott, que tenía casi la jarra en su mano desperdiciara la ventaja que tenía y literalmente tirara la Claret Jug por la ventana.
Y allí, debajo de la window, como diría los ingleses estaba el gran Ernie Els que me parece a mí que ganó su último Major. El sudafricano no se lo creía pero tras frotarse bien los ojos asintió con la cabeza y se dispuso a recoger la famosa Jarra sumando un título más a su prolífica carrera.
Este año Scott ha dicho que "quiere resarcirse" de los del 2012 y Bubba Watson, uno de los grandes favoritos a la victoria, "que aquí hay muchos candidatos a ganar y que él es uno más". Cuánta razón tiene el doble ganador del Masters que, seguramente, como Olazábal, daría una de las Chaquetas Verdes que tiene por la famosa Jarra y la victoria en el torneo de golf más antiguo y prestigioso del mundo.
Pero ni él ni nadie lo va a tener fácil. Vista la primera vuelta con el liderato de McIlroy -otro de los súper favoritos al triunfo- los candidatos se van sumando y ya hay muchos nombres que están ahí, desde el propio Tiger que de verdad parece recuperado de todos su males -ya veremos- a un Sergio García que sigue sonriendo y esa es buena señal. Entre ellos más de 100 jugadores, si cien que podrían ganar aún el tercer Major de la temporada.
"Muchos, mucho, dirán ustedes". Les propongo un juego. Hagan hoy, con una jornada ya jugada, una lista de 10 jugadores como posible ganador del torneo. Les apuesto una pinta a que ninguno de ellos es el ganador, o sí. Claro, ustedes amigos lectores ya juegan con ventaja. Un McIlroy líder tras el primer día es complicado que no se agarre al liderato con fuerza, pero hagan la prueba y verán cómo no aciertan tantos. Yo por si acaso pongo dos euritos y mi favorito número uno a Adam Scott. Ya veremos.