"Uno cree haber tenido un mal día hasta que ve jugar a Casillas", ponía en su twitter, algo que fue contestado por numerosos aficionados de diferentes formas posibles. Después de eso, Gonzalo reconoció que ha aprendido dos lecciones nuevas. "Una, Pinehurst 2 no es mi campo, y dos, no habar de fútbol en twitter, que la gente se pone muy nerviosa".
Lo cierto es que el madrileño se va del Us Open con ganas de meditar y recapacitar cómo va su año en el PGA Tour, hasta el punto de decir que como la cosa no cambie "el año que viene veo elPGA Tour por la tele".