La maldición del Madeira Islands Open tenía guardada una desgraciada última noticia. El domingo, el caddie del escocés Alastair Forsyth, de 52 añosy natural de Zimbawe,sufría una parada cardiorespiratoria en el hoyo 9, el último de su partida. Atendido por los médicos del Tour y sanitarios de la localidad portuguesa fue trasladado al hospital Dr. Nelio Mendoça, donde se confirmó su muerte.
Ante la tristeza general, la organización y los jugadores decidieron acordar terminar el torneo a 36 hoyos, como estaba previsto después de las continuas interrupciones de los tres días anteriores. Antes de seguir se guardó un respetuosísimo minuto de silencio en recuerdo de Mac, como se le conocía en el Tour.
Uno de los más afectados era Pedro Oriol, que recordaba en las redes sociales que "con él conseguí la Tarjeta del Tour en 2010. Grandísimo caddie y mejor persona. Descanse en paz". Además, aunque salía con opciones el domingo, reconoció que "no he sentido ninguna razón para seguir jugando", y ha terminado con 74 golpes y un total de -1.
El torneo se ha decidido en un play off entre Daniel Brooksy Scott Henry, que empataron tras los 36 hoyos con -9. En el primer hoyo de desempate Brooks firmó el par y puso fin a un torneo marcado por la desgracia. Antonio Hortal y Jordi García Pinto han terminado con -6 en el top 3.