Los nubarrones y las posibilidades de fuerte lluvia en el Shell Houston Open durante la jornada del domingo son cada vez mayores según los meteorólogos del PGA Tour. Esas opciones alcanzan ahora mismo un 80% a lo largo del desarrollo y en el horario de esa cuarta y última jornada, pero lo malo no es eso.
Según el departamento de meteorología de la PGA esas fuertes tormentas vendrían acompañadas con un potente y peligroso aparato eléctrico que podría obligar de producirse a suspender temporalmente la jornada del domingo. Si esta, una vez comenzada, no se pudiera terminar el domingo se pospondría hasta el lunes con el consiguiente trastorno para los jugadores que vayan a disputar la próxima semana el Masters de Augusta ya que además contaría con un día menos de entrenamiento en el recorrido de Bobby Jones.