Aunque Tiger Woods firmó ayer su peor vuelta de las tres que ha jugado en el Northwestern Mutual World Challenge, el norteamericano sigue manteniendo el liderato que logró el viernes después de firmar un gran 62 que podría darle la victoria el domingo.
Ayer Tiger estuvo más plano en su juego y cometió bastantes más errores que el viernes, sobre todo en el green, firmando cuatro bogeys y arreglándolos con cuatro birdies para terminar entregando una tercera tarjeta al par del campo que le seguía dejando al frente de la clasificación pero con las cosas mucho más apretadas por detrás.