MDO | Sábado 07 de abril de 2012
El norirlandés Padraigh Harrignton quiere seguir siendo protagonista en esta 76º edición de un Masters de Augusta al que había llegado con ilusión y con ganas de hacerlo bien. Sus cambios en el swing y su mentalidad más agresiva le habían dado opción de favorito para conseguir un nuevo Major en su carrera.
Harrington quería hacer un buen Masters pero luego las cosas no salen como uno quiere. Sus dos primeras jornadas las terminó con dos vueltas no muy buenas de 71 y 73 golpes para terminar al par del campo, sin riesgo de fallar el corte, pero lejos de la cabeza, a cinco golpes.
Pero en la tercera, el norirlandés apretó las piezas de su motor y empezó a jugar de nuevo a su mejor nivel. Con una tercera jornada de 68 golpes (cuatro bajo par), Paddy se metió de lleno en el torneo y ahora, sin quedarse muy lejos de la cabeza, tendrá que echar el resto si quiere ser de la partida en la cuarta y definitiva jornada.
La temporada de Harrignton no está siendo demasiado buena, como tampoco lo fue la del año pasado. Pero esta quiere que sea diferente, sobre todo porque por medio hay una Ryder Cup -septiembre en Chicago- y Harrignton debe de ser uno de los que estén en el equipo europeo, aunque si los resultados no llegan, tendrá complicado meterse en el combinado de José María Olazábal.