MDO | Sábado 17 de marzo de 2012
Al final fue sólo un susto, o quizá menos que eso porque ninguno de los planes previstos inicialmente en el calendario de Tiger Woods se han movido por su retirada el pasado domingo en el Cadillac Championship. Tras abandonar el torneo en el hoyo 10 saltaron todas las alarmas. Primero parecía que era la rodilla y luego se anunció que era su tendón de Aquiles, pero que Tiger se fuera conduciendo él mismo, nos dejaba más tranquilos y le quitaba hierro al asunto.
Primero Tiger seguirá recuperándose del susto que tuvo cuando terminó el hoyo 10 y decidió para de jugar ¿Las razones? Al parecer, una molestia en su tendón de Aquiles izquierdo y muy malas sensaciones después de un día en el que tampoco estaba jugando demasiado bien.
¿La verdadera causa de irse en el hoyo 10? Quizá por que su flamante Mercedes estaba aparcado a apenas 100 metros de donde se encontraba así que que mejor sitio para salir rápidamente, sin tumultos y sin mas líos cuando no estaba a gusto y el tendón empezaba a molestarle.
En el médico, tras conducir él mismo y sin más aparentes problemas que una leve cojera, Tiger no ha tardado mucho en comunicar que todos tranquilos, que jugará la Tavistock Cup -no se imaginan como respiran de contentos los organizadores de este evento benéfico- y que después tomará parte, como también estaba previsto, en Bay Hill, en el Arnold Palmer Invitational.
Tiger ha ganado este torneo en seis ocasiones y no habría nada mejor para él y para acallar tantos rumores sobre su mal estado físico que consiguiera la victoria, aunque quizá Tiger no fuerce esta semana más de lo debido teniendo en cuenta que el primer Major de la temporada está a la vuelta de la esquina y querrá estar en Augusta al cien por cien, algo que todvía no ha conseguido.
De momento, la buena noticia es que no hay noticias y Tiger seguirá su plan previsto de juego, por ahora.