Josega Fernández | Domingo 09 de octubre de 2011
La celebración del Madrid Masters ha confirmado que el golf en España es mayor de edad. Es un deporte que cuenta con afición, con buenos torneos, buenos campos y donde vienen buenos jugadores, como el número uno del mundo.
La presencia de Luke Donald en el Madrid Masters ha dado un impulso más al golf en España. El inglés, líder del ránking mundial, ha venido a Madrid a revalidar el título del año pasado después de pelear por la FedExCup, y eso hay que valorarlo muy positivamente.
Junto a la presencia de Donald, la celebración del Madrid Masters en El Encín ha dejado, una vez más, muy buenas señales para el golf. La afición ha respondido y numeroso público se ha acercado a esta prueba del Tour Europeo. Una de las cosas más interesantes ha sido la acumulación del público en los greenes. Muchos de ellos ya habían jugado este campo, de reciente inauguración, y les anima ver a los buenos en el mismo escenario que ellos mismos han probado. Eso sí, un poco más complicado, claro. Es lo bueno del golf, que nivela las cosas.
Los aficionados han disfrutado además con una semana de espectáculo. Ver de cerca a Luke Donald, Álvaro Quirós, los Molinari, Olazábal o Matteo Manassero es un privilegio para muchos que ya conocen a estos jugadores, pero también es un buen escaparate para los no iniciados y que pueden "convertirse y bautizarse", según las políticas de la Real Federación Española de Golf. Este tipo de acontecimientos de nivel internacional ayudan y mucho.
Por si fuera poco, aunque el ganador de esta edición sea un "desconocido", la emoción ha sido intensa, con un hoyo 18 muy intimidatorio para acabar, y que ha estado a punto de dar la vuelta al resultado, cuando Slattery cayó al agua con tres golpes de ventaja. Emoción, público y grandes jugadores ayudan al golf a dar el estirón y poco a poco se va notando.