Guillermo Salmerón | Domingo 02 de octubre de 2011
El inglés Luke Donald no se conforma sólo con ser el número uno mundial. Donald, que esta semana disputará el Madrid Masters en El Encín, quiere ser el primer jugador en la historia del golf en liderar la misma temporada al final del año las listas de ganancias del Circuito americano y del europeo, algo que, desde luego, no es nada sencillo.
Ser el número uno del mundo y hacer olvidar con su juego y, sobre todo con su regularidad, a todo un Tiger Woods no es fácil, pero el inglés lo ha conseguido, eso sí, dándose un auténtico palizon a un lado y otro del Atlántico y jugando los dos circuitos, el americano y el europeo al máximo nivel.
Tan bien lo está haciendo el jugador británico que esta semana defiende título en El Encín, en Alcalá de Henares, que ahora mismo es el líder de ganancias tanto en la PGA americana como en Europa. En el viejo continente suma antes del Dunhill Links suma algo más de 3.378.000 euros, sacando más de 1.000.000 a su más inmediato seguidor, el norirlandes Rory McIlroy que suma en Europa 2.151.000.
Pero si en Europa lo tiene sencillo, no tanto en Estados Unidos, donde la diferencia que tiene con el segundo clasificado, el estadounidense Webb Simpson es apenas de 67.000 dólares.
Quizá por esa razón Donald, de 33 años, pueda tener en la recamará volver a Estados Unidos a jugar antes de que termine la temporada -quedanm cuatro torneos- aunque en principio no pensaba en hacerlo quedándose a jugar sólamente en Europa, sobre todo porque su mujer está embarada y la fecha para dar a luz a su segundo retoño estaría rondando una fecha cercana a dentro de seis semanas. "En este momento no estoy pensando en jugar otro caso en el PGA Tour, pero tengo que sopesar los pros y los contras de tratar de ganar la lista de ganancias, primero por razones personales -el nacimiento de su hijo- y después porque necesito descansar".