Igual la casa es parte de todos sus problemas. Dentro de muy poco, el ex número uno del mundo, Tiger Woods, abandonará Orlando donde vive desde que se separó y se trasladará a Jupiter Island, en Florida, donde está su nueva residencia.
Tiger está encantado con su cambio –así lo ha dicho en su Twitter- y parece que este se producirá en muy poco tiempo. El ex número uno del mundo tendrá a su disposición todos los aditamentos necesarios para practicar y seguir mejorando un swing que sigue en construcción.
De momento, el traslado parece que se llevará a cabo en muy poco tiempo ya que la nueva residencia de Tiger está casi terminada. La nueva casa de 9.000 metros cuadrados se asienta sobre una parcela de 12 hectáreas y le costó a Tiger Woods cerca de 40 millones de dólares en 2008. La casa la compró cuando todavía estaba casado con Ellin Nordegren aunque ahora poco tiene que ver con lo que se diseñó en ese momento.
La zona de entrenamiento –la verdadera joya de la corona de la nueva residencia de Tiger Woods- tiene cuatro greenes, cada uno completamente diferente al otro, seis bunkers y sitio más que suficiente para entrenar con tranquilidad y sin miradas moletas de nadie. Veremos si su nueva residencia le da la calidad suficiente que ahora le falta para seguir luchando por unas victorias que hace más de un año que no llegan.