Con 46 años, el golf español ha tenido la suerte de contar con una de las grandes estrellas del golf mundial en una temporada mágica para él. Con tres triunfos, la Ryder Cup y el puesto vigésimo quinto del Ranking Mundial, esta ha sido, sin duda, el gran año del "Pisha", de Miguel Ángel Jiménez.
La Ryder de Miguel Ángel Jiménez
Jimenez: "Quiero devolver al golf lo que me ha dado"
Una coleta y un puro únicos
Comenzó el año como una temporada más para este malagueño de 46 años que, con más de 500 torneos a sus espaldas a lo largo de su carrera profesional, tenía como "enorme ilusión" poder tomar parte en la Ryder Cup de Celtic Manor.
Decía Jiménez al principio de 2010 que, seguramente, esta era su última oportunidad para jugar una competición como esta y que "tenía que darlo todo para poder estar en un equipo europeo que quería recuperar la Copa al precio que fuera". Y el desafío no era nada fácil.
Para poder estar en el equipo lo tenía que hacer muy bien, ganar torneos y situarse con la holgura suficiente en la clasificación de la Ryder para disfrutar de una cita que, finalmente, fue histórica.
Pero para estar allí, Jiménez tuvo que hacerlo muy bien. Su primer título de la temporada fue el Omega Dubai Desert Classic cerrando el triunfo con 11 bajo par y derrotando en el play-off a un Lee Westwood que al final del año terminaría como número uno del mundo.
Pasados unos meses, Jiménez siguió jugando bien. Sabía que con una sola victoria no se metería en el equipo así que siguió apretando, jugando y tomando parte en muchos torneos del Tour Europeo. Su siguiente triunfo fue en el Alstom Open de Francia y, de nuevo, su guarismo triunfador, -11.
Cada vez estaba más cerca de su objetivo y parecía que casi tenía hecha una victoria que le podía llevar a su gran sueño: estar en la Ryder de octubre.
Pero antes de que terminara la temporada, Jiménez nos volvió a dar una nueva alegría consiguiendo el triunfo en el Omega European Masters, en Suiza, en el mismo campo y en el mismo torneo en el que antes Severiano Ballesteros, Manolo Piñero, José María Olazábal y Sergio García ya habían conseguido la victoria.
Con 21 abajo selló definitivamente una de sus mejores temporadas como jugador profesional, se metió de cabeza en el equipo europeo de la Ryder Cup, solucionándole de paso un problema a Colin Montgomerie y ascendiendo hasta el vigésimo quinto puesto de un Ranking Mundial en el que es el mejor español clasificado.
Lo que ha hecho en 2010 por el golf español Miguel Ángel Jiménez es de reconocer. Sus tres victorias han ayudado a que los seis triunfos españoles coloquen a nuestro golf entre los mejores del viejo continente y también para darse cuenta de que, hoy por hoy, sigue estando entre lo más granado del golf mundial.
En 2011, Miguel tiene muchos retos por cumplir. Seguró que será uno de los ayudantes de José María Olazábal en la Ryder de 2012, pero también es seguro que se querrá clasificar por sus propios medios para estar y jugar la Ryder. Querrá seguir ganando torneos y subiendo en el Ranking Mundial. Todos retos complicados de cumplir, pero conociendo al de Churriana seguro que nos da muchas alegrías y satisfacciones. Si hubiera que apostar, desde Elperiodigolf apostariamos a que el 2011 también será el año de Jiménez.