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El “Moving Day” más emocionante del siglo XXI

Guillermo Salmerón | Sábado 10 de abril de 2010

El sábado es el día más importante en un torneo de golf. Además de saber los que han pasado el corte, el tercer día del torneo es el que reorganiza y divide a los que lucharán definitivamente por la victoria y a los que se quedarán en la parte de debajo de la tabla. Este sábado el poderío inglés de Poulter y Westwood tendrá respuesta en los americanos con Woods, Mickelson y Anthony Kim. Con ellos Yang y Choi parten como principales favoritos a la victoria.



A las 20,45 de la noche hora española salen al tee del 1 Westwood y Poulter. Los dos ingleses parten como principales favoritos a la victoria en un Masters en el que Tiger Woods todavía no ha dicho la última palabra. Los ingleses saben que están ante una oportunidad histórica y que uno de los dos podría volver a poner a su país al frente del golf mundial. Los dos están jugando de maravilla y cualquiera de ellos podría ser un ganador de prestigio para este primer Major de la temporada.






 

Frente a ellos el poderío norteamericano se transforme en oportunidades para Tiger Woods, el favorito sentimental de todo el mundo, Phil Mickelson, que está jugando muy bien y que está en disposición de ponerse otra chaqueta al hombro y Anthony Kim. El asiático estadounidense es la gran promesa del golf americano y que pudiera ganar un grande sería para él un salto espectacular en su carrera y la confirmación de que el golf americano ya tiene relevo para Woods y compañía.

 

Junto a ellos, sin posibilidad de que los seniors den otra sorpresa como el jueves -nos referimos a Couples, Langer, Watson y Lyle- aparecen los coreanos que pueden aguar la fiesta a ingleses y americanos. Yang, con -5 y Choi, con -6, tienen todas las opciones para ganar en Augusta. ¿Lo harán? Hoy pueden dar el primer paso para conseguirlo.

 

En cuanto a los españoles nos queda esperar a ver si Jiménez y García hacen hoy una vuelta de ensueño y logran meterse entre los veinte primeros para mañana soñar con un top-ten. Lamentablemente hoy por hoy parece que es a lo único que podamos optar.