Si en la primera ronda del Farmers Insurance Open de Torrey Pines, el número dos del mundo no destacó, en la segunda ronda ha brillado con luz propia gracias a su juego y a las acusaciones de Scott McCarron de utilizar un wedge con estrías cuadradas, algo prohibido por la USGA.
Con una tarjeta de 67 golpes, gracias a seis birdies y un bogey, Phil Mickelson se ha aupado hasta la décima posición y está, con -7, a cuatro golpes de los líderes, el estadounidense D.A. Points y el japonés Ryuji Imada.
Mickelson protagonizó la segunda ronda por su buena tarjeta, con cuatro birdies en los últimos cinoc hoyos, pero también porque ha sido acusado por Scott McCarron de utilizar un wedge, el Ping Eye 2, de estrías cuadradas, algo prohibido por la USGA. McCarron no ha pasado el corte.
El día dio para mucho, como la tarjeta de -10 de Michael Sim, que se ha colocado con -9 en tercera posición. Cerca de la cabeza también están Robet Allebny (-8), Lucas Glover (-6) o Ernie Els (-5).
Se han quedado fuera hombres como Ryan Palmer, Bubba Watson o John Daly, que después de firmar 79 y 71 golpes ha insinuado su retirada del golf: "Se acabó. No puedo competir como lo hacía antes y prefiero dejar sitio a otros antes que jugar así de mal", dijo.